Experiencia.
https://www.youtube.com/watch?v=CoKu_FP8MMc
Después de
mirar el vídeo, donde nos presenta la situación del mundo, con sus luces y
sombras, y nos plantea un reto. ¿Cómo te has sentido durante el visionado? ¿En
qué escenas: bien, mal, triste, asustado, emocionado, esperanzado,
decepcionado,…? ¿Qué puedes hacer tú?
Reflexión.
Yo, el Señor, tu Dios,
te instruyo por tu bien,
te marco el camino a seguir.
Isaías 48, 17
-La jornada
de Jesús en Cafarnaún (Mc 1, 21-39)
:
Entra en la sinagoga a enseñar.
Cura
a un hombre que tenía un espíritu inmundo y a la suegra de Pedro.
Al anochecer, cuando se puso el
sol, curó a muchos enfermos.
Se levantó de madrugada, cuando
todavía estaba muy oscuro, se marchó a un lugar solitario y allí se puso a
orar.
-Jesús experimenta todas
nuestras alegrías y gozos:
Del
sembrador y del segador (Jn 4, 36-38).
Del
hombre que halla un tesoro escondido (Mt 13, 44).
Del
pastor que encuentra la oveja perdida (Mt 18, 10-14).
De
los novios en el día de su boda (Jn 2, 1-12).
Del
padre cuando recibe a su hijo pródigo (L c 15, 11-32).
De
los niños deseosos de acercarse a él (Mt 19, 13-15).
De
los amigos que le abren las puertas de su casa (Mt 9, 9-13).
Por
la acogida que se da a la Palabra (Lc 10,2 1-24).
Por
la conversión de una mujer pecadora (Lc 7m 36-38.44-50).
-La gente se alegra y da
gloria a Dios:
Por
sus milagros y sus palabras.
También
nosotros acogiendo a Jesús podemos vivir alegres y compartir esta alegría:
Poner
esperanza donde hay desilusión.
Alegría
donde hay tristeza.
Vida
donde hay muerte.
Cristo,
por su espíritu, se sirve de los bautizados, la Iglesia, para salvar a la
humanidad.
-La oración de Jesús:
Se
dirige al Padre con confianza.
Obedece
la voluntad del Padre.
Le
habla con amor.
Padre, este es mi deseo: que los
que me has dado estén conmigo donde yo estoy y contemplen mi gloria (Jn 17, 24).
Instruye
a sus discípulos para que oren, les invita a presentar sus peticiones a Dios en
su nombre y él mismo escucha las plegarias que se le dirigen.
-Jesús
nos enseña a orar:
Cuando
recéis, no uséis muchas palabras… pues vuestro Padre sabe lo que os hace falta
antes de que se lo pidáis. Vosotros orad así: “Padre nuestro que estás en el
cielo” (Mt 6, 9).
-El
padrenuestro:
Resumen de todo el Evangelio.
La más perfecta de las oraciones.
Centro del sermón de la Montaña.
Recoge en forma de oración el contenido esencial del
Evangelio.
Medio para cuando nos encontramos en cualquier
dificultad en la oración.
1.Padrenuestro, que estás en el cielo:
Nos ha devuelto a Dios.
Nos anima a dirigirnos a él como hijos.
2.Santificado sea tu nombre.
Pedimos saber amar a Dios y vivir según sus
mandamientos.
Nos comprometemos a buscar a Dios para que sea
conocido y bendecirnos por todas las personas.
3.Venga a nosotros tu reino.
Pedimos el retorno de Cristo.
Y su reino: nuestra santificación y compromiso al
servicio de la justicia y de la paz.
4.Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
En la tierra y nuestro
corazón la salvación de Dios se realice plenamente, cumpliendo nosotros sus
preceptos.
5.Danos hoy nuestro pan de
cada día.
La bondad del Padre.
El pan fruto de la
justicia y la solidaridad.
El pan de la Palabra de
Dios y de la Eucaristía.
6.Perdona nuestras
ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
Porque nos reconocemos
pecadores.
Será atendida si nosotros
hemos perdonado a los que nos han ofendido.
7.No nos dejes caer en la
tentación:
Nos ayude a saber entender
que nos hace crecer en el bien y que nos conduce al pecado y a la muerte.
Pedimos vigilancia y
perseverancia.
8.Y líbranos del mal:
La familia humana sea
librada de Satanás y de sus obras.
El don de la paz.
Amén:
Después, terminada la oración, dices: amén,
refrendado por medio de este “amén”, que significa “sí sea”, lo que contiene la
oración que Dios nos enseñó (San Cirilo de Jerusalén).
-Una jornada cristiana:
Al
levantarte:
Con
el corazón alegre santíguate pensando en Dios.
Agradécele
tu vida y los que te rodean.
Alaba al Señor, Dios, en todo
tiempo, ruégale que oriente tu conducta (Tobías
4, 19).
Dirígete
a las personas con las que te encuentres con amor.
Durante
el día:
Piensa
a menudo en Dios, porque él siempre piensa en ti.
Acuérdate del Señor todos los
días (Tobías 5, 5).
Háblale
como a un amigo.
Si
pasas por delante de una iglesia y está abierta entra: reza el Padrenuestro.
En
tu lugar de estudio o trabajo: se organizado, esfuérzate y esfuérzate por
aprender si asistes a clase.
Se
amigo de tus amigos, perdona siempre, se amable en el trato, especialmente con
aquellos que son marginados, sufren bullying o no están solos, ignorados por el
grupo.
Si algo te sobra, dalo con
generosidad (Tobías 4, 16).
En
la comida:
Bendice
la mesa agradeciendo al Señor los alimentos.
La
bendición de Jesús te ayudará: “Bendito seas Señor, Dios del universo, por este
pan, fruto de la tierra y del trabajo del hombre, que recibimos de tu
generosidad; bendito seas, Señor, Dios del universo, por este vino, fruto de la
vid y del trabajo del hombre, que recibimos de tu generosidad”.
Come
con moderación.
Ayuda
a tus padres, pareja, hermanos, ancianos, vecinos y conocidos:
No desprecies los buenos consejos (Tobías 4, 18).
Pon cuidado, hijo, en toda tu
conducta, compórtate con educación (Tobías 4,
18).
Por la noche:
Cuéntale
al Señor todo lo que has visto, oído y vivido.
Pídele
perdón por tus pecados.
Dale
gracias por el bautismo y cuanto has recibido de Él y los demás.
Recuerda
a María, Jesús te la dio como madre para que la ames, trates, imites y te dejes
amar y ayudar por ella.
-La señal de la cruz:
El
cristiano comienza y termina la jornada con ella.
Modos:
Santiguándonos:
“En el nombre del Padre,…”.
Persignándonos:
“Por la señal de la santa cruz (frente), de nuestros enemigos líbranos
(labios), Señor, Dios nuestro (corazón). En el nombre del Padre,…”.
Autoevaluación.
1.¿Qué debemos hacer al despertar y levantarnos?
a. Arrodillarnos.
b. Santiguarnos.
c. Asearnos.
2. Persignarse es:
a. Decir “En el nombre del
Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”.
b. Decir: “Por la señal de la
Santa cruz, de nuestros enemigos libranos señor”.
c. Las dos oraciones.
3.¿Cómo se dirige Jesús al Padre?
a. Con miedo.
b. Con temor.
c. Con confianza.
4. Jesús nos anima a usar ________ palabras cuando recemos.
a. Pocas.
b. Cortas.
c. Muchas.
5.¿Cuál es la más perfecta de las oraciones?
a. El Avemaría.
b. El Gloria.
c. El Padrenuestro.
Soluciones: c5, a4, c3, b2, b1.
Reflexión.
Consejos para educar en la
fe a mi hijo:
-Por la noche, podéis rezar
con el/ella oraciones que le abran a la amistad con Dios y a ver su amor en la
propia vida. Un ejemplo puede ser el Padrenuestro. Es muy bueno hacer presenta
a Dios en la vida cotidiana de la familia, como por ejemplo, dar gracias a Dios
en momentos de alegría, pedir su ayuda en momentos difíciles, aprovechar
noticias para hacer comentarios que resalten los valores evangélicos (entrega,
gratuidad, perdón, servicio, alegría, esperanza,…). Hacerles ver que Dios les
quiere y les ha dado una familia, unos amigos, una parroquia, un centro
juniors. No olvidéis que marcáis el camino de vuestros hijos, y les podéis
enseñar un camino de amor y felicidad.
Ritos Juniors.Pg. 11.
Infancia. Itinerario de
Oración. Conocer oraciones que nos unen como hermanos e hijos de Dios. El
Padrenuestro, oración con el Equipo.
Plan Diocesano de
Formación. Pg. 14
Juventud. Itinerario de
oración. Descubrir que la vida está orientada desde la Palabra cuando existe un
diálogo con Dios, por medio de la oración. Profundizar en el Padrenuestro como
momento de relación filial con Dios. Significado de la petición sobre el
Padrenuestro. Descubrirse como hijos a través de la oración del Padrenuestro.
Plan Diocesano de
Formación. Pg. 26.
Celebración.
Reza sin prisas el
Padrenuestro, intentando pensar en cada petición.